lunes, 20 de abril de 2009
¿Internet? ¿Cuál internet? Se jodio...Me jodieron
En aquel cuartito hecho de bloques, el tiempo había confabulado de tal forma que a la par de una vieja máquina de escribir y un cerro de negativos inundando el espacio, varios cables USB, memorias flash, cámaras digitales, audífonos y una pila de CDs relucían en una pequeña mesa de madera, algo renca y manchada con óleo.
"En la actualidad este es mi mundo, mi pequeño universo donde yo me muevo, ahora uso eso se las tecnología. Me gusta la computadora, me gusta el Internet", comenta Alberto Sandoval mirando con cierta admiración aquel cuartito hecho de bloques. Don Alberto es un personaje a quien se le conoce en casi toda Masaya por su labor como educador, pintor, fotógrafo y hasta carpintero.
A como él dice, entregó toda su juventud al servicio de la educación y paralelo a eso se dedicó a la fotografía y a la pintura "Siempre como necesidad...necesidad mía de contar cosas, de decir cosas, pero a través los colores, las formas...escuchar a través de los ojos...", explica don Alberto.
Pero ahora ya no usa la cámara de rollo. Su mundo gira entorno a una computadora que desde hace dos años aprende a usar y se ha convertido, junto a su escaner e impresora en su instrumento de "combate, privacidad y libertad"-como él reconoce. "He aprendido a usar ese aparatito (la computadora) y prácticamente ya lo uso tanto como usaba mi máquina de escribir, por que esta es la máquina del presente. Yo vivo haciendo pequeños cuadernos, bajando música de internet...me encanta la música...hasta chateo y todo...", Dice con una sonrisa orgullosa.
Su mayor sueño es crear una micro empresa de publicidad, pero "en lo que me especializaría es en el retocado de fotos...me encanta. ¿A quién no le va a gustar que una foto de alguien querido, alquien que perdió esté otra ves en su vida y no en un papel amarillo, lleno de hoyos y toda malmatada?...A mí me gusta y por eso quiero especializarme en eso y ganar mis centavitos de paso."
Feliz en su computadora, trata de enseñar todos los programas que tiene..."ese google earth...que increíble, puedo viajar a Europa con sólo querer...pero ahorita me tienen jodido, me quitaron el internet, por que dicen que gasta mucho. Me agarrastes de buena forma-me dice son una media sonrisa-la semana pasada estaba todo deprimido por que no tenía internet, sólo pasaba dormido, ya ahora lo estoy superando...ya lo mandé a la mierda..."
En la puerta del cuartito guinda una frase, según él, de gratitud a las personas de su casa que ya no quieren internet en su casa:
domingo, 19 de abril de 2009
MTV llegó a Altagracia.
A la par del circo hay dos pequeñas carpas, dentro de la primera esta sentado frente al televisor un señor que al principio confundí con un vigilante. Recostado en su silla de plástico, con la camisa de vestir entre abierta y el cabello alborotado aquel señor decide atenderme.
- Buenas, venía a hacerle una entrevista. ¿Usted es el dueño del circo?
- ¿De qué medio viene usted? ¿Es periodista? – Me pregunta con un tono cansado.
- No, soy estudiante de comunicación – le respondí.
Después de haberle aclarado esto Francisco José Cantillano Áreas dueño de aquel pequeño centro de recreación, ya un poco más relajado procede a brindarme la entrevista. Don Francisco es un señor de 61 años con un pasado lleno de historias. Hijo de una cocinera y un chofer llegó hasta tercer grado de primaria.
- ¿Desde hace cuanto trabaja usted en este circo?
Primero dejame te explico algo. Nosotros no somos de la línea circense. Esto nace a raíz de la revolución, en un programa de fono mímica que se transmitía por la radio, llamada “La voz de la victoria”. Cuando triunfó la revolución el programa se termino, y fue entonces cuando yo decidí continuar con la línea de ese programa a partir de 1981.
- Entonces, ¿cómo llamaría usted al trabajo que hacen aquí?
El Mini Teatro de Variedades consiste en el enfoque de nuestro género, sin embargo aquí hacemos de todo, por eso el nombre “MTV”. Alternamos la línea de la fono mímica como el transformismo y comicidad, con otras ramas del arte circense como son el transformismo que es cuando los homosexuales se transforman en mujeres, los payasos, los malabaristas, contorsionistas, flamistas y bailarinas. En total, somos 9 artistas los que participamos. Pero n todos viven aquí. La mayoría trabaja en otros lugares, pero yo me quedo porque usted sabe… tengo que cuidar mi negocio.
- ¿Qué lugares eligen para presentar su función?
Bueno nosotros andamos de barrio en barrio y nos quedamos ahí por lo general un mes. Depende de cómo sean las plazas. Hay lugares en los que nos va bien, pero en otros no tanto. Hace rato estuvimos ahí por el mercado oriental y se nos llenaba bastante. También ahí por el kilómetro 9.
- ¿Solamente se presentan en los barrios?
Si. También hemos ido a colonias. Pero no vamos a todos los barrios. Por ejemplo, al Hugo Chávez o al Dimitrov yo no me voy a ir a meter. Porque es que tampoco me puedo arriesgar a que me desbaraten el negocio.
- Y antes de entrar al mundo artístico. ¿A qué se dedicaba?
Pues mira, yo he hecho de todo. De 1967 a 1972 fui boxeador. Boxeé, pelee y todo. Hice guante con Alexis Argüello, con “El toro” Coronado y mi última pelea fue un mes antes del terremoto del 72. Fue una pelea de ocho rounds en el estadio Cranshaw. Después de eso jugué básquetbol en la Federación de Basquetbol de Nicaragua, cuando Tito Sequeira era presidente. Y ya en el 77 me entro el gusanito y entre a trabajar en la fono mímica.
- ¿En qué otras cosas trabaja además de la fono mímica?
Yo trabajo en publicidad también. De día trabajo en publicidad y en la noche aquí.
- ¿Con alguna agencia?
No, no. Yo ando ahí anunciando en el perifoneo a pequeños negocios, farmacias, o si hay algún muerto todo eso yo lo hago. Con lo que gano ahí, lo uso para componer algunas cosas de aquí, porque es que ya todo esta bien viejo. También ayudo a mis dos hijas que ya están estudiando en la universidad.
- ¿Cuántos hijos tiene usted?
Te voy a ser sincero. En esta vida de la farándula uno siempre tiene varias mujeres, y discúlpame que te lo diga así. Pero si, así es la vida del artista. Tuve varias mujeres y ahora tengo dos hijos varones y dos hijas mujeres.
- ¿Cuáles han sido las mayores dificultades que se le han presentado al trabajar frente al público?
Fijate que el público Nicaragüense golpea mal al artista que esta en este negocio. Cuando la gente va a ver espectáculos de otras partes del mundo, llegan con mucha educación y con respeto. Mientras que a nosotros muchas veces nos agreden verbalmente. Pero esas son las cosas que nosotros aguantamos para trabajar en lo que nos gusta. Aquí a como te dije hacemos de todo, hasta regalamos cosas. Hacemos concursos, competencias de bicicleta y en navidad nuestro propio santa Claus le regala juguetes a los niños. Es más, fíjate que nuestro Santa existe desde antes que el famoso Santa Claus nica. Lo que pasa es que nosotros estamos siempre en el anonimato.
- ¿Han recibido apoyo de alguna empresa o del estado?
No, para nada. A como te dije, yo esto lo mantengo solito con lo que gano en mi negocio de publicidad. Hace poco vino un ingeniero que quería dar un espectáculo para los niños y me dejo mil pesos. Pero de ahí, nadie me ayuda a mí. Es más, te voy a contar que hace poco fuimos un grupo de artistas con Osman Balmaceda, presidente de los artistas, hasta la asamblea para pedir que aprobaran una ley en donde pedíamos que se nos pasara una pensión a los artistas de la tercera edad, que hemos dedicado toda nuestra vida a Nicaragua. Pero ya sabes como es aquí. Lo de la asamblea quedo solo en iniciativa, igual que siempre. Uno llega hasta allá y ellos ni nos voltean a ver, es como un burla mas bien.
- ¿Hasta cuando tiene planeado seguir en este negocio?
La verdad yo espero, si dios me presta vida, seguir en esto hasta que me muera. Porque esto es algo que se lleva en la sangre, es como una vocación. Además de que es lo que me gusta hacer, es lo que se hacer y lo hago bien (risas).
- Pero, a pesar de la crisis en la que vivimos ahorita, ¿piensa seguir trabajando en esto?
¿Porque no? Uno aquí aprende a vivir con alegría, aunque las cosas estén jodidas uno siempre da la mejor cara. Así es esta vida, las cosas no son así de fáciles y aunque nos veamos en “la sin remedio”, a como decimos por acá “el show debe continuar”.
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